Corren tiempos difíciles
En muchos territorios del planeta, cada vez en más, la vida nos ha colocado ante el reto del aislamiento.
En nuestras casas, celdas o habitaciones de hospital. Alejados en muchos casos de nuestros seres queridos, sin poder abrazarles, privados de la naturaleza y de la libre circulación.
En crisis.
Dicen que en chino tradicional la palabra crisis puede traducirse también como “punto crucial”.
Y es exactamente el momento en el que estamos.
Podemos elegir vivir todo esto desde las sombras, desde el miedo, la preocupación, la angustia, la ansiedad, el recelo, el acecho, el espionaje del otro, el victimismo, la culpa…
O podemos elegir darle la vuelta y convertirlo en una oportunidad crucial, llena de creatividad, aceptando uno de los desafíos o regalos que tenemos: tiempo, tiempo para conocernos a nosotros mismos, para cultivar todo aquello que estaba en pausa.
Es un tiempo crucial para el planeta que por fin respira libre de nuestra intrusiva presencia. Podemos aprender del gran poder sanador y reparador que tiene la naturaleza, y atrevernos a traspasar nuestros límites, mirar las musarañas o las grietas de la pared, y dejar volar la imaginación.
Es tiempo para hacer cosas una y mil veces pospuestas en nuestro hogar.
Nuestro hogar que puede ser un espacio físico y también nuestra propia vida; podemos recorrerlo despacio, mirándolo con otros ojos, apreciando sus rincones.
Tenemos la ocasión, en este mundo veloz y trepidante, de bajar el ritmo, paladear la lentitud, dedicarnos tiempo de calidad en solitario… O acompañados.
Quiénes tenemos la suerte de vivir con niños, o cerca de ellos, ahora disfrutamos de un regalo impagable:
Observarlos y aprender con ellos, de su paciencia y aceptación ante una situación adversa. De su capacidad de habitar el presente sin agobios; de su imaginación y creatividad encerrados entre cuatro paredes…. dándonos una lección cada día de ingobernable alegría y de amor incondicional.
A pesar de todo.
A pesar de nuestra impaciencia, pegados a pantallas que nos alejan aún habitando el mismo espacio, de nuestras malas contestaciones y nuestra dificultad para transitar sin prisas el momento presente.
Maria Montessori escribió: “No me sigan a mí, sigan al niño”.
Estamos en el punto crucial.
Podemos elegir y aprender de su gran capacidad resiliente que nos conecta con el presente, con lo sutil de cada instante como lo único existente.
Remando juntos…
Desde Montessori Canela queremos soplar un poco para impulsar vuestras velas en este viaje y deciros ‘estamos juntos’: sí, tú, yo, nosotros estamos remando juntos, acompañándonos tal y como lo hemos hecho desde hace una década.
Ahora más que nunca es el momento de cuidar un espacio mental de bienestar. No dejarnos caer. Y si alguna de nosotras cae, estamos todas para sostenernos.
Es tiempo de buscar retos intelectuales que nos conecten con la alegría de vivir, agitando nuestras ideas, alentando todo pensamiento que nos permita volar más allá de nuestro encierro.
Afortunadamente, como tantas personas encerradas en el mundo ya sabían, las ideas no se pueden capturar, ni dirigir, ni detener…y existen y se multiplican cuando se pueden compartir.
Por eso queremos seguir tejiendo una red de cuidado y apoyo mutuo que nos permita acompañarnos en estos tiempos de incertidumbre. Y para ello estamos trabajando en varios proyectos…
La primera idea que está por salir a la luz es una sorpresa que aún no podemos desvelar, ya que estamos ultimando los detalles para poder compartirla muy prontito.
Estamos seguras que os va a encantar.
Y la segunda ya está en marcha. Se trata de un encuentro semanal en el que podremos disfrutar de un taller con unos contenidos de lo más interesantes.
Se trata de webinars GRATUITOS donde nos reunimos en línea cada jueves a las 19.00h (hora de España peninsular) para regalarnos a nosotras mismas una pausa de la mano de alguno de nuestros formadores y también de amigos de Montessori Canela.
Para inscribirte pincha aquí: https://www.montessoricanela.com/webinars/
Y muy, muy pronto volveremos con nuevas noticias…
¿Cara o cruz?
¿Remar o dejarte llevar por la corriente?
Aún podemos elegir.
Aquí estaremos, si decides remar. Desde Montessori Canela continuamos trabajando por una educación más humana, inclusiva, accesible y respetuosa, estamos más cerca que nunca.