Líneas de Trabajo
F + A + I
Formación + Acompañamiento + Investigación
Formación continua, Acompañamiento e Investigación en Educación Montessori y Neurociencia aplicada a la educación.
Sede en: Barcelona, Pamplona y en otras ciudades de España, durante todo el año.
Montessori Canela ha creado diferentes espacios de formación continua para profesores, profesionales y familias vinculadas a la educación que buscan nuevas herramientas filosóficas, pedagógicas y científicas para mejorar su práctica de aula y/o el acompañamiento de niños, niñas y jóvenes en su proceso educativo. Por ello, junto a nuestro equipo de Formadores y Colaboradores hemos diseñado diferentes líneas de trabajo, algunas de las cuales serán implementadas en diferentes ciudades españolas durante todo el año. Desde estos espacios ponemos a disposición los siguientes formatos de formación en Barcelona, Tarragona, Pamplona, Logroño, Madrid, Málaga y Sevilla.
Nos sentimos comprometidos con promover una forma de hacer escuela y vivir la escuela respetuosa de los procesos de vida de niños, niñas y jóvenes de promover una educación con sentido común, humanizadora, sensible a las necesidades y fortalezas de todos los miembros de una comunidad educativa, que a su vez tenga una profunda base científica, filosófica y metodológica que contribuya a la resolución de situaciones cotidianas en la relación estudiante-profesor-familia. Vemos que en este espacio el enfoque Montessori, siempre y cuando se aborde como una propuesta que va mucho más allá de los materiales Montessori, puede aportar diversas herramientas a los profesores para mejorar su práctica de aula.
Un primer paso en este sentido es la formación y acompañamiento en la creación de Ambientes Psíquicos para el aprendizaje escolar a proyectos educativos y profesores interesados en mejorar o transformar su práctica de aula. De acuerdo a lo que hemos podido conocer en distintas propuestas en España, es el primer paso a realizar antes de implementar Ambientes Preparados Físicos de aprendizaje, basados principalmente en la incorporación de materiales Montessori en el trabajo práctico de aula, puesto que comenzar directamente con materiales produce más angustia y frustración al ver que las dinámicas de aula resultan muy opuestas a lo que en teoría debería ser.
Éste es un trabajo lento y de largo aliento. De poco sirve contar con un espacio lleno de materiales si no se ha reconocido asimismo ese adulto como ser humano con virtudes y defectos, y que con todo eso puede avanzar y construir nuevas realidades. De esta manera, se hacen visibles principios básicos de coherencia entre el decir y el hacer, entre la teoría y la práctica, entre la escuela y la familia, imprescindibles para llevar adelante la formación del ser humano en los tiempos actuales, con una mirada amorosa y sincera, alejada del juicio rápido y liviano (‘de pasillo o de reuniones de despacho’) que tanto daño hace en las relaciones humanas de un equipo docente.Construir y descubrir herramientas para la creación de Ambientes Preparados Psíquicos, ayuda a maestros y familias a posicionarse desde una perspectiva no lineal del proceso de enseñanza y aprendizaje, donde el error forma parte de ese proceso y por tanto, libera al adulto de esa carga cultural de sentirse experto y sin derecho a equivocarse.
El enfoque Montessori va mucho más allá de los materiales ampliamente conocidos en el mundo educativo, es una filosofía de vida que promueve la transformación del adulto para poder vivir una vida más plena y contribuir a transformar la realidad. Por ello creemos que debe llegar a más y a más personas, y nuestra misión como Montessori Canela es colaborar en abrir nuevos caminos para que esto sea posible.
Nuestra visión de la educación y más aún, de la educación Montessori nace a partir de nuestra experiencia como profesores, madre, padre, investigadores y formadores vinculados a este enfoque educativo desde hace muchos años (formamos parte del equipo de profesores de varios colegios Montessori y nuestros 4 hij@s se han educado en esta manera de hacer y vivir). Todo esto nos permite afirmar que Montessori responde más a un modelo educativo que a un método. Durante varios años, como Montessori Canela hemos viajado por toda España compartiendo algunos aspectos montessorianos que, por diversas ‘falsas creencias’ (lo que también denominamos como ‘mitos urbanos’), han quedado alejados de las personas.
Queremos promover una experiencia educativa que nos permita cuestionar aquella mirada centrada en el aprendizaje de contenidos curriculares específicos y fragmentados, así como también aproximarnos de una manera más real a Montessori, pues no es sinónimo de ‘aprender a utilizar sus materiales de desarrollo’ o de ser ‘happy group’. Construir en comunidad experiencias educativas que nos permitan vincular los aprendizajes con las diversas experiencias propias de la vida y así aprender a mirar más allá de lo que habitualmente estamos acostumbrados a mirar.
Encontrar este equilibrio es un desafío, y por ello, se transforma en una Gran Aventura Educativa (GAE*). Una Aventura Educativa que nos invita a replantearnos lo esencial de la vida en la escuela, el valor de aprender conectado con las experiencias cotidianas y un despertar de la conciencia, un despertar de nuestro mundo interior como adultos que acompañamos estos procesos educativos de niños, niñas y jóvenes, pues el aprendizaje es un proceso vital y propio de cada ser; no es ajeno a las múltiples formas de percibir el mundo y de comprometernos con su cuidado como una manifestación de agradecimiento. Este agradecimiento es el que se despierta a través de la Educación Cósmica, un eje central en la educación Montessori.
La Educación Cósmica nos invita a transitar de lo micro a lo macro, y viceversa. En ella se entrelazan la visión ecológica, la unidad del todo, la interconexión de todos los pueblos, la interdependencia de la vida y la visión global de nuestra existencia.
Solamente desde esta visión cósmica se pueden comprender las necesidades fundamentales del ser humano y cómo a partir de estas necesidades ha ido construyendo los códigos propios de su cultura: una cosmovisión sobre el origen del universo, sobre el origen de la vida, sobre el origen del ser humano, sobre el origen del lenguaje escrito, el origen de los números… Esta mirada global nos permite abordar los aspectos curriculares desde un enfoque holístico, desde un todo integrado y no fragmentado en asignaturas. Por eso, los niveles de concreción curricular adquieren sentido cuando se entrelazan y no cuando se aíslan, quedando descontextualizados y ajenos de la realidad del grupo.
A veces comenzamos por aquello más externo y visible de Montessori (los materiales de desarrollo) y es ahí donde se van creando estos diferentes mitos urbanos, uno de ellos relacionado con lo inaccesible (económicamente hablando) que resulta implementar los Ambientes Preparados. Intentamos comenzar a ‘hacer Montessori’ y nos desanimamos porque relacionamos los Ambientes Preparados sólo con los materiales.
Estas representaciones sociales nos han sido transmitidas por años, y conocemos aquél Montessori que sólo es para unos pocos… y cuando algo es de unos pocos, deja de ser un derecho y se transforma en un privilegio. Entonces nos preguntamos ¿quién conoce Montessori en los campos de refugiados? O ¿Montessori en algunas aldeas del Tibet? O ¿Montessori en barrios como el tuyo o como el mío? Experiencias educativas de este tipo existen y deben ser conocidas. Muchos de estos proyectos han sido impulsados, apoyados o dirigidos por parte de nuestro equipo de formadores. Desde Montessori Canela por eso trabajamos día a día con ilusión y profesionalismo, para compartir aquellos otros aspectos que hacen de Montessori una forma de vida y una invitación permanente a un trabajo interior de nosotros como adultos, para ayudar a que la Educación Montessori vuelva a ser un derecho de más y más niños, niñas y jóvenes, y no un privilegio.
Hay muchos aspectos de Montessori que no repercuten en una inversión económica, de nada nos sirve tener maravillosos Ambientes Preparados Físicos si no hemos trabajado en prepararnos a nosotros mismos en todos los aspectos de nuestra vida y así poder crear diferentes Ambientes Psíquicos para ampliar las posibilidades de bienestar en nuestras realidades educativas.
Re-encantarnos con la alegría de aprender, de descubrir y de construir nuevas realidades a partir de un viaje interior como adultos, ésa es la invitación de nuestra Gran Aventura Educativa Montessoriana.
*GAE: Gran Aventura Educativa. Proyecto educativo del Colegio Cristóbal Colón de Conchalí, Santiago-Chile. Agradecemos a Germán Aburto y Mario Soto Alarcón por permitirnos realizar esta analogía de Montessori con la GAE. Hemos sido profesores por años en este colegio y ha sido una de las experiencias más bellas e inspiradoras de nuestras vidas.
A partir del legado histórico de Maria Montessori, junto con las investigaciones científicas de la Neurociencia aplicada a la educación y la relación de Montessori Canela con el proyecto “La Gran Aventura Educativa” (GAE), identificamos ocho palabras clave que guían nuestra propuesta formativa. Todas estas palabras se unen en una danza cósmica que viene y va, que va y viene, y que en este momento de nuestras vidas, vibra con la esencia de los planteamientos de Maria Montessori.
Realizando un trabajo personal, podemos volver a nuestro origen y así lograr: